Están de luto en el Reino de España

Están de luto en el Reino de España. Según los últimos periódicos llegados al basurero parece ser que lamentan profundamente la muerte de un icono de su régimen político. Al parecer fue alguien que, formando parte del aparato del anterior régimen fascista, tomó las medidas necesarias para permitir el establecimiento de una monarquía parlamentaria. Una vez realizada su labor aquel presidente fue abandonado y vilipendiado por los recién llegados al aparato del nuevo régimen.

Ahora, tras años fuera de la arena política, su imagen ha pasado a cumplir un último servicio: el de icono de un régimen decadente que se ha quedado sin líderes respetables. Cuenta la leyenda que ya se hizo algo similar cuando el Cid murió: se cuenta que sus hombres subieron su cadáver a lomos de su caballo para ahuyentar a sus enemigos.

Dicen que 30.000 súbditos del Reino de España han ido a rendir honores al difunto, prueba evidente de que es falso eso que dicen de la desafección de los españoles por la política y de que no creen ya en el régimen del 78.

Los periódicos que nos han llegado muestran, también, el malestar de súbditos del Reino de España por la presencia en su capital de un número indeterminado (algunos lo reducen a 50.000, mientras que otros lo hacen subir hasta 2.000.000) de visitantes llegados desde nuestra República Subterránea de Iberia. Les acusan de haber causado destrozos varios y, lo que es peor, de haber rodeado y agredido a sus fuerzas de seguridad.

Algunos de los testigos presenciales (y así parecen confirmarlo algunas de las imágenes publicadas en las webs de Iberia Subterránea) afirman que algunos de los implicados en los actos violentos los que se se refieren los diarios españoles colaboraban con las fuerzas de seguridad del Reino de España, por lo que se sospecha que en realidad eran policías disfrazados como ciudadanos de Iberia.